Gordon Shumway, más conocido como ALF, era un alienígena del planeta Melmac que accidentalmente se estrelló en la Tierra. Fue encontrado por la familia Tanner, quienes lo adoptaron y lo escondieron en su casa.
ALF era un ser divertido y travieso, siempre buscando diversión y aventura en su nueva vida en la Tierra. A menudo causaba problemas en la casa de los Tanner con sus travesuras, pero siempre se disculpaba y se esforzaba por hacer las paces.
A medida que pasaba el tiempo, ALF se volvió cada vez más cercano a la familia Tanner y aprendió mucho sobre la cultura humana. Sin embargo, siempre se preocupaba por regresar a su hogar en Melmac y encontrar una manera de reparar su nave espacial para poder volver.
Un día, ALF recibió una llamada de emergencia de sus amigos en Melmac, quienes le informaron que su planeta estaba en peligro debido a una catástrofe natural. ALF sabía que debía regresar inmediatamente para ayudar a su gente. Con el apoyo de la familia Tanner, ALF logró reparar su nave espacial y partió hacia Melmac.
La familia Tanner se sintió triste al despedirse de su amigo alienígena, pero estaban felices de haberle ayudado a volver a casa. ALF regresó a Melmac y ayudó a salvar a su planeta y a su gente, convirtiéndose en un héroe y un líder entre su raza. Sin embargo, prometió a los Tanner que volvería a visitarlos algún día.
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